El uruguayo Pablo Enrique Quiñones, hasta el domingo técnico del campeón Cacahuatique y nuevo inquilino de la primera división, confirmó a Grupo LPG las razones por el cual desistió firmar un nuevo contrato con el equipo de Ciudad Barrios para poder dirigirlo en su primera experiencia en primera división.
“Terminamos contrato con Cacahuatique el pasado domingo, pero es por asuntos familiares y no por temas económicos que prefiero poner una pausa en mi carrera en la zona oriental del país y no continuar siendo el técnico de Cacahuatique, he estado tres años fuera de mi casa y es por la sencilla razón que mi hijo ya tiene 13 años y necesita mi apoyo directo ya que mi esposa trabaja en San Salvador y el mayor tiempo él pasa solo en casa en Santa Ana”, explicó el timonel sureño en respuesta a lo que ya había adelantado el presidente del equipo oriental, Juan José Amaya, donde adelantó que Quiñones no seguiría como técnico del equipo de Ciudad Barrios.
El técnico charrúa aclaró ese punto al destacar que “es el real motivo de no seguir en Cacahuatique, se lo he dicho a las únicas tres personas del equipo con que he hablado sobre este punto, no es que no quiera tomar ese desafío de dirigirlos en la liga mayor, pero el tema de mi hijo es prioridad para mí y es el único motivo por el cual no continuaré en el Cacahuatique”, repitió Quiñónez a fin de dejar claro su punto de vista sobre su decisión personal.
“Salgo por la puerta ancha del equipo, pero más allá de eso, siento que en el corto tiempo que estuve con ellos se cumplieron metas importantes, no tuvimos chance de reforzarnos, de tener a otro extranjero, se conformó un plantel de 21 jugadores, en la primera fecha se nos lesionó nuestro portero y por ello llegó Manuel González al equipo, pero estoy satisfecho que las metas se cumplieron, nunca renegamos de nada, utilizamos las herramientas que teníamos, jugamos con solo un extranjero en el plantel, salimos por primera vez campeón de liga y de paso logramos el ascenso deportivo a la liga mayor en un equipo que luchó con todo. Andrés Grueso fue el defensa colombiano que tuvimos como nuestro único refuerzo extranjero”, apuntó.
Finalmente, Pablo Quiñónez dijo que “mi decisión de no dirigir a Cacahuatique no quiere decir que deje de trabajar por lo que resta este año. Si sale algún trabajo en otra zona lo podremos tomar, no es que deje de trabajar, pero veremos ofertas si salen para poder seguir nuestra labor cerca de mi familia, quiero darle prioridad a mi hijo y por eso decidimos no seguir trabajando en el oriente del país, pero mi salida no es un punto final, podría ser un punto y coma porque uno nunca sabe lo que el fútbol nos puede deparar.”
vía: elgrafico