En una ocasión dijo que recibiría una bala por Donald Trump. Ahora, Michael Cohen es el testigo estrella de los fiscales en el juicio penal contra el expresidente por presuntos pagos para comprar el silencio de la actriz porno Stormy Daniels.
Pero si bien si el exabogado personal de Trump ―ahora convertido en su enemigo― subió al estrado este lunes para dar al jurado una perspectiva privilegiada de los aspectos clave del caso, también será un testigo con retos importantes.
Como trasfondo está su tortuosa historia con el expresidente republicano. Cohen se desempeñó como su abogado personal y solucionador de problemas hasta que sus acciones fueron objeto de una investigación federal que llevó a condenas por delitos graves y prisión para Cohen en 2019, aunque ningún cargo para Trump, quien en ese entonces ocupaba la Casa Blanca.
Cohen subió al estrado este lunes. Se espera que se presente ante el jurado como alguien que ha reflexionado sobre sus delitos y que los ha pagado con prisión. Pero los miembros del jurado también escucharán que el abogado, ahora sin licencia, no sólo se declaró culpable de mentir al Congreso y a un banco, sino que recientemente afirmó, bajo juramento, que no fue sincero ni siquiera al admitir algunas de esas falsedades.

vía: telemundo