El municipio de Apopa, situado en la zona norte de San Salvador, contará con un nuevo «by-pass» que proporcionará mayor fluidez al tránsito que proviene de la zona norte del país, y que día a día representa un severo congestionamiento para ingresar a San Salvador.
El Banco Mundial ha aprobado para El Salvador un financiamiento de $150 millones que está enfocado en el desarrollo de sistemas de transporte y movilidad resiliente.
Entre las obras que incluye el proyecto está la construcción de un «by-pass» en el municipio de Apopa, el cual agilizará el flujo vehicular que procede de la zona norte del país o desde Honduras por medio de la frontera El Poy, en Chalatenango.
El ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, confirmó que ya se completó la etapa de diseño del «by-pass», y pronto comenzará la obra.
Agregó que esto se sumará al paso multinivel Integración para establecer un corredor logístico de acceso a San Salvador.
«Tenemos una obra importante que vamos a ejecutar y es un «by-pass» en Apopa. Está finalizado el diseño de ingeniería y estamos trabajando con financiamiento del Banco Mundial, que nos ha aprobado $150 millones. La idea es evitar que la carga vehicular que va o viene de la zona norte del país pase por Apopa y se pueda desviar por este “by-pass”», señaló Herrera.
El titular del Ministerio de Obras Públicas (MOP) explicó que, debido a la magnitud del proyecto, la construcción se dividirá en tres tramos y, a la vez, se habilitarán tres procesos de licitación.
En este sentido, el nuevo «by-pass» conectará la carretera Troncal del Norte con la autopista Este-Oeste, conocida como carretera de Oro, que es una de las interconexiones entre municipios como Ilopango, Soyapango, San Martín, Apopa y San Salvador.
En la carretera Troncal del Norte, el nuevo proyecto estará cerca del desvío hacia Tonacatepeque y terminará en la carretera de Oro, aproximadamente un kilómetro antes del paso elevado.
Rodríguez explicó que el problema del tráfico vehicular radica en que alrededor de 35,000 vehículos provenientes de la zona norte del país pasan por el área urbana de Apopa, que no tiene la capacidad para recibir esa carga vehicular.
Por lo tanto, para el acceso en la carretera de Oro se construirá un puente atirantado, de 300 metros aproximadamente; mientras que en el río Las Cañas se elaborará otro de 200 metros.
Las primeras estimaciones detallan que la inversión en el «by-pass» superará los $100 millones del financiamiento, el resto se distribuiría en obras complementarias como un moderno sistema de transporte en el municipio de Apopa con paradas de abordaje y semáforos inteligentes en las intersecciones de mayor carga vehicular.
El financiamiento del Banco Mundial está previsto que se ejecute en un periodo de seis años.
Al completar esta obra, que según estimaciones del MOP tomará dos años, se creará un corredor vial desde la residencial La Gloria, en San Salvador, hasta la carretera de Oro, ya que en el redondel Integración se han construido pasos elevados para brindar fluidez.
Este corredor es una alternativa que permitirá conectar Santa Tecla con Apopa usando la periferia de San Salvador, sin necesidad de ingresar a las arterias principales de la capital.