Mueren seis palestinos durante una redada israelí contra el sospechoso de disparar a unos hermanos colonos

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Las fuerzas israelíes llevaron a cabo una incursión a plena luz del día en Yenín, en la Ribera Occidental del Jordán, contra el sospechoso del asesinato de dos colonos judíos, dejando al sospechoso y al menos a otros cinco hombres palestinos muertos, según informaron el martes funcionarios de ambas partes.

Las Fuerzas de Defensa de Israel identificaron al sospechoso como Abdul-Fattah Hussein Kharousha y lo describieron como un “operativo terrorista de Hamás”. El Ministerio de Sanidad palestino identificó a Kharousha, de 49 años, como uno de los seis muertos en Yenín. Los otros cinco eran todos hombres de unos 20 años, dijo el ministerio, y al menos otras 11 personas resultaron heridas.

Hamás emitió un breve comunicado diciendo que “llora a los mártires del heroico campo de Yenín”, pero no reivindicó inmediatamente a Kharousha como miembro.

Las fuerzas de IDF llevaron a cabo una redada separada en la ciudad de Nablus al mismo tiempo para detener a dos hijos de Kharousha, dijeron. Son “sospechosos de ayudar y planear el ataque terrorista”, dijeron los militares, añadiendo que están bajo custodia para ser interrogados.

La redada es al menos la tercera que tiene lugar a la luz del día este año. Las dos anteriores —una en Yenín y otra en Naplusa— se saldaron con 11 víctimas mortales palestinas, entre militantes que eran objetivo de las Fuerzas de Defensa de Israel, personas que se enfrentaban a las fuerzas israelíes y transeúntes.

Los hermanos colonos judíos Hillel Yaniv, de 21 años, y Yagel Yaniv, de 19, murieron tiroteados mientras conducían por Huwara, en la Ribera Occidental del Jordán, el 26 de febrero. Vivían en el cercano asentamiento israelí de Har Bracha.

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró que la operación había “matado hoy al abominable terrorista que asesinó a sangre fría a los dos encantadores hermanos Hillel y Yagel Yaniv”. Netanyahu terminó una breve declaración en video añadiendo: “Como digo una y otra vez, una y otra vez: quien nos haga daño – su sangre estará en su propia cabeza”.

Durante la incursión de este martes en el campo de refugiados de Yenín, las fuerzas de las FDI