Rubiales no ha presentado este viernes su dimisión como presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF) por el beso en la boca, que dio a la jugadora Jenni Hermoso en la final del mundial.
Ella fue la que me subió en brazos y me acercó a su cuerpo. Y yo le dije: ‘¿un piquito?’ y ella me dijo, ‘vale'”.Así lo explicó durante su intervención ante la Asamblea de la Federación Española de Fútbol.
Definió el beso a Hermoso como “espontáneo, mutuo, eufórico y consentido”, aunque pidió disculpas “por el contexto en el que se produjo”.