En 2023, la compra de alimentos se volvió una pesadilla para parte de la población salvadoreña. Según la última encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP), de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), hubo familias que dejaron de comer algunos alimentos por su alto costo.
El informe del IUDOP indica que el 52.7% (de 1,280 encuestados) dejó de comprar algunos alimentos porque los precios habían aumentado. El resto tuvo que endeudarse para cumplir con los compromisos del hogar.
Un 35.9% de los consultados respondió que en el 2023, debido a las dificultades económicas, tuvieron que adquirir nuevas deudas y un 39.5% tuvo que pedir dinero prestado a otras personas para poder cumplir con los compromisos mensuales del hogar.
“Debemos destacar el incremento sustancial en las mediciones desde 2019, porque independientemente del producto alimenticio que consuma, más de la mitad de gente se ha limitado de adquirirlos por el encarecimiento de los precios”, manifestó Laura Andrade, directora del IUDOP.
Andrade expuso que la compra de alimentos fue el principal gasto de los hogares salvadoreños el año pasado. De acuerdo con la encuesta, el 70.9% consideró que la compra de alimentos fue el principal gasto en su hogar, un 10.3% indicó que su principal gasto fue el pago de recibos de servicios básicos, un 5% que la compra de medicamentos; el resto respondió que otros gastos.
“En diciembre de 2020, cuando se dio la liberación de las actividades económicas, el gasto en alimentos alcanzaba un 35.3% versus el 70% que se alcanzó el año pasado, es decir, el doble”, resaltó.
Al ser consultados sobre la tendencia en el precio del frijol, maíz, azúcar, leche y huevos, el 90.2% afirmó que han subido, el 8% dijo que siguen igual y solo un 1.8% dijo que han disminuido.
En octubre del año pasado, LA PRENSA GRÁFICA, reportó una subida de 122.2% ($54.70) en el precio quintal de frijol tinto nacional, en los últimos dos años, al comparar las estadísticas del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
“El principal flagelo para la población en el 2023 y lo sigue siendo, la situación económica. Grandes sectores de la población salvadoreña la están pasando mal, a muchos les cuesta llegar a final de mes. En este contexto quienes la están pasando peor son las mujeres, las familias de menos ingresos, las familias de la zona rural y los obreros de las zonas periféricas de las ciudades”, mencionó Omar Serrano, vicerrector de Proyección Social de la UCA.
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vía: EL Economista
