El delantero uruguayo Luis Suárez continuó este sábado su tratamiento en la rodilla derecha, mientras crecen los rumores sobre su posible salida del Gremio brasileño para firmar con el Inter Miami.
“Trabajando, profesional siempre”, afirmó el ariete de 36 años en sus redes sociales, junto a una fotografía en la que aparece con un fisioterapeuta que le da cuidados en la rodilla derecha, en la que sufre fuertes dolores como consecuencia de una artrosis.
El Gremio, tercer clasificado en la Liga brasileña, se enfrenta este sábado al Atlético Mineiro en partido correspondiente a la decimosexta jornada.
Según la prensa brasileña, Suárez se ha quedado fuera de la convocatoria del técnico Renato Gaúcho, a pesar de haber participado en la sesión de entrenamiento del viernes, según imágenes divulgadas por el club.
El entrenador ya había adelantado un día antes que el exjugador del Liverpool y del FC Barcelona solo jugará si tiene “la cabeza” en Porto Alegre.
El entrenador, harto de la “telenovela”
“Independientemente de los dolores, tiene que estar centrado aquí, sabe lo importante que es para el equipo”, indicó Renato Gaúcho, quien se refirió a la situación del delantero como un “problema” más propio de una “telenovela mexicana”.
“En todas las ruedas de prensa tengo que hablar de Suárez. Es un problema que está en manos del presidente. Todo lo que ha salido (en la prensa) no deja de ser verdad, pero solo la directiva puede decidir”, dijo Renato Gaúcho a los periodistas.
Los medios brasileños aseguran que Suárez quiere dejar el Gremio e intentar unirse a las filas del Inter Miami, que acaba de fichar a Lionel Messi y a otros de sus antiguos compañeros en el FC Barcelona y amigos, Sergio Busquets y Jordi Alba.
Pondrá todo de su parte
El goleador, que lleva marcados cinco tantos en el campeonato liguero, está dispuesto a devolver todos los salarios desde que se incorporó al equipo, en enero pasado, y abonar una cantidad de dinero extra para rescindir su contrato, que se extiende hasta diciembre de 2024, según ESPN Brasil.
El Gremio volvió este año a la primera división del Campeonato Brasileño y actualmente marcha en la tercera posición. También ha alcanzado las semifinales de la Copa de Brasil, en las que se medirá al Flamengo.
