“Mi salud está deteriorada, pero aquí venimos con ansiedad, pero con fe y esperanza”, fueron las palabras que dijo Raúl Mijango al llegar al centro judicial para enfrentar una audiencia especial, en la que un juzgado decidiría si le otorgaba o no, la libertad anticipada.
La audiencia fue realizada por el Juzgado Primero de Vigilancia Penitenciaria y Ejecución de la Pena de San Salvador, pero Fiscalía solicitó un informe al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), lugar en el que recibe tratamiento médico Mijango. Por esa razón, el juzgado aún no ha dado su resolución.
“Estoy solicitando la libertad condicional del señor Mijango. El resultado es raro técnicamente, porque lo que estoy solicitando es la libertad condicional humanitaria porque mi representado cumple con una serie de requisitos que la ley pide, entre otros, que se haya cumplido un tercio de la pena, que sea mayor de 60 años y también está acreditado que padece de tres enfermedades graves e irreversibles”,dijo Mauricio Ramírez, defensor del imputado.
Según lo descrito por el abogado, han acreditado que su representado sufre de diabetes, insuficiencia renal crónica e hipertensión. “El Juzgado no da términos, solo solicitó informes y será el Seguro Social el que dará su tiempo y esperaría que sea rápido por la situación de salud de mi representado ya que prácticamente se está jugando con su estado de salud y su vida, que es sumamente peligroso”, añadió Ramírez.
El defensor sostiene que en los últimos dos meses Mijango ha sido trasladado al hospital en cuatro ocasiones y que en una de estas permaneció hasta 13 días ingresado, “la situación de salud de mi representado es grave”, explicó.
Por su parte, Mijango, quien fue uno de los mediadores en la tregua entre pandillas ocurrida entre 2011 y 2013 en el gobierno de Mauricio Funes, confirmó a su llegada al centro judicial que padece de insufiencia renal y que “su vida depende de una máquina”. El imputado presentó una carta al Juzgado pero no fue recibida porque no estaba certificada. Según su defensor, en el escrito le pidió a la jueza que le permitiera ir a su casa y lo dejara en libertad.
La condena y otros procesos
El 12 octubre de 2018, el Juzgado Especializado de Sentencia B de San Salvador declaró culpable a Raúl Mijango por el delito de extorsión agravada y le impuso una condena de 13 años y 4 meses de prisión.
La juez valoró las pruebas presentadas por la Fiscalía que vinculaban al exmediador de la tregua entre pandillas con una extorsión hacia una empresa arrocera.
La Fiscalía acusó a Mijango de intervenir con los cabecillas de pandillas para cambiar la modalidad de extorsionar a la empresa. Según la acusación, ordenó pasar de pagos en efectivo en las colonias donde distribuía el producto, a entregar una extorsión de $6,000 en productos distribuidos en partes iguales para las tres pandillas más numerosas: Mara Salvatrucha y las dos facciones del Barrio 18 (Revolucionarios y Sureños).
Además, Mijango fue procesado por homicidio y se le dio sobreseimiento definitivo; también fue acusado por agrupaciones ilícitas por el caso Tregua, pero recibió sentencia absolutoria y por último fue procesado por tráfico de objetos prohibidos y también le decretaron una sentencia absolutoria.
vía: LPG