Un general ucraniano confirmó este jueves a CNN que Ucrania había recibido de Estados Unidos las controvertidas municiones de racimo, después de que el presidente Joe Biden dijera la semana pasada que había tomado la “difícil decisión” de aprobar su transferencia a Ucrania.
“Acabamos de recibirlas, aún no las hemos utilizado, pero pueden cambiar radicalmente [el campo de batalla]”, declaró el jueves el general de brigada Oleksandr Tarnavskyi, comandante de la Operación de Fuerzas Conjuntas Tavria, en una entrevista con Alex Marquardt, de CNN.
“El enemigo también entiende que con la obtención de esta munición, tendremos ventaja. El enemigo renunciará a esa parte del terreno donde es posible utilizar esto”, dijo.
No se ha informado previamente de la llegada de los clusters estadounidenses.
Los altos mandos decidirán las “zonas del territorio donde se puede utilizar”, dijo Tarnavskyi, señalando que “se trata de un arma muy poderosa”.
Tarnavskyi hizo hincapié en las restricciones sobre el uso de clusters, diciendo que su uso está prohibido en zonas densamente pobladas, incluso si están ocupadas por las fuerzas rusas. EE.UU. ha dicho que tiene garantías por escrito de Ucrania de que no se utilizarán en zonas con civiles y que se hará un seguimiento de su uso para eventuales operaciones de desminado.
“Los rusos piensan que lo utilizaremos en todas las zonas del frente”, añadió. “Esto es muy erróneo. Pero están muy preocupados”.
Estados Unidos afirmó que la decisión de suministrar munición de racimo a Ucrania se debe al escaso suministro de proyectiles de artillería estándar a Kyiv. El suministro de munición de racimo es “temporal”, según el Consejero de Seguridad Nacional de EE.UU. Jake Sullivan.
“Una vez que [la producción] alcance un nivel en el que la producción de proyectiles unitarios pueda satisfacer las necesidades de Ucrania, no habrá necesidad de seguir suministrando municiones de racimo”, declaró este martes, declinando facilitar un calendario.
¿Por qué son controvertidas las municiones de racimo? Las municiones de racimo son botes que contienen entre decenas y cientos de bombetas más pequeñas, que se abren por encima del objetivo previsto, dispersándolas por la zona. Un temporizador las fusiona para que exploten más cerca o sobre el terreno, esparciendo metralla diseñada para matar tropas o derribar vehículos blindados como tanques.
Estas armas han sido prohibidas por más de 100 países, porque las bombetas que dispersan caen sobre una amplia zona, lo que supone un riesgo para los no combatientes. Sin embargo, Rusia ha utilizado estas municiones durante su invasión de Ucrania.
vía: CNN
