Las fuerzas de Wagner avanzan por la región de Lipetsk, a unos 450 kilómetros de Moscú.
La fuerza aérea rusa ha atacado los convoyes de Wagner y se están estableciendo posiciones defensivas alrededor de la capital, Moscú.
Prigozhin afirma que sus tropas han sido recibidas como ‘libertadores’ y dice que pudo tomar el cuartel general militar en Rostov sin pelear.
El avión presidencial parece haber salido de Moscú, sin embargo, el Kremlin dice que Putin todavía está en la capital.
Polonia puso el ejército en alerta máxima, Letonia restringe la frontera y la UE continúa monitoreando la situación.
La inteligencia militar del Reino Unido dice que la rebelión representa el “desafío más importante para el estado ruso en los últimos tiempos”.