El volante de Dragón y de la selección sub 22, Elmer Alexis Bonilla, lamentó lo sucedido la noche del pasado viernes cuando aceptó salir sin permiso del cuerpo técnico del hotel Villa Selecta del complejo deportivo de la FESFUT. El elemento salió a comprar golosinas y algunas bebidas que repartieron a unos soldados que resguardan la entrada de dicho complejo junto a sus compañeros Enrico Dueñas, volante del FC Cartagena 2 de España y del guardameta Adriel Martínez, jugador del Motril de la tercera división de España.
“Después del partido ante República Dominicana, llegamos al apartamento del hotel tras cenar, ya estaba en mi habitación para alistarme a dormir cuando sonó mi móvil, era Enrico (Dueñas) el que me llamaba y me dijo que si lo podía acompañar a la gasolinera cerca del complejo junto a Adriel (Martínez) y por no ser mala onda con ellos les acompañé a comprar churros y otras cosas y bebidas que les llevamos a unos soldados que estaban alrededor del complejo”, explicó vía teléfono el jugador de Dragón.
El oriundo de Anamorós confirmó que “salimos del hotel hacia esa gasolinera que está arriba del complejo, fue como a las 11:30 de la noche y regresamos unos minutos después, salimos por el portón (principal) del parqueo que está por la cancha sintética y regresamos por el mismo portón principal, lo más que nos tardamos fueron unos 10 a 12 minutos, solo eso compramos, incluso habían otros compañeros que estaban despiertos y que nos vieron, entre ellos estaban Rafael Tejada quien estaba hablando por teléfono cuando nos vio entrar al hotel”, detalló el mediocampista mixto de 19 años.
Bonilla confesó que fue llamado por el profesor Edgar Henríquez el domingo y que nunca se imaginó que sería castigado.
“El profesor nos llamó ayer (domingo) casi al mediodía para reunirnos con él en la cancha sintética junto con todos los profesores, ahí estaban el profesor Rodas y el profesor Serrano y nos dijo a los tres que estaba pasando esto y nos dijo que tomáramos nuestras cosas del hotel y que nos saliéramos de la concentración sin siquiera escucharnos”, aseguró.
El jugador de los mitológicos que llegaba por primera vez a una selección nacional lamentó lo sucedido al expresar que “lo único malo que hicimos es que salimos sin autorización de ellos, eso lo acepto y lo lamento mucho, nunca se me cruzó en la mente que me iba a perjudicar, nunca el profesor nos preguntó qué era lo que pasaba, no nos preguntó nada ni siquiera que le explicáramos, Enrico y Ariel intentaron hablar con él pero no quiso escuchar el por qué sucedió eso, no nos preguntó nada, los demás miembros del cuerpo técnico intentaron hablar con él para que les explicáramos lo que había sucedido, pero no aceptó”, detalló Bonilla. “Incluso, nos reunimos con los demás compañeros del plantel para platicar con el profesor Henríquez para que cambiara de opinión, pero no quiso escuchar nada”, afirmó.
El jugador de la sub 22 reconoció su error al confesar que “la verdad, es que acepto mi culpa por no haber dicho nada a nadie, ni al cuerpo técnico, nunca pensé que esto me iba a perjudicar, solo por salir a comprar unas golosinas y bebidas para los soldados, incluso yo debí comprarles eso porque Enrico y Adriel casi no saben hablar español, mi error fue eso, incluso, Enrico se compró una medicina para su nariz, rechazo lo que se dice en redes sociales, no hemos andado en otro lugar que no haya sido la tienda de la gasolinera o que estábamos tomando ya que yo no bebo”, aclaró.
El jugador de Dragón destacó que “la experiencia que me deja es que me arrepiento por haber salido sin permiso, de haber sabido que me iban a castigar, en ningún momento les habría hecho caso a mis compañeros para acompañarlos a comprar fuera del hotel.”
vía: el gráfico
